El diagnóstico temprano y la intervención adecuada son esenciales para mejorar la calidad de vida de niños y jóvenes con Trastorno del Espectro Autista (TEA), resaltan especialistas de Córdoba.
El autismo se ha convertido en un tema central dentro de la salud mental infantil y juvenil. La psicoanalista y docente Claudia Littgenstein destacó la importancia de detectar tempranamente los síntomas y ofrecer herramientas de intervención tanto en el hogar como en la escuela.
Según Littgenstein, aunque no existe una definición única del autismo, ciertos síntomas recurrentes pueden orientar el diagnóstico, entre ellos dificultades en el lenguaje, mutismo selectivo o conductas repetitivas. Cada niño enfrenta la realidad del TEA de manera distinta, por lo que los tratamientos deben adaptarse a cada caso.
La especialista también subrayó la importancia de respetar los tiempos y formas de cada niño en la formulación de demandas y la interacción con los adultos, evitando la intrusión y promoviendo un acompañamiento sensible.
Finalmente, Littgenstein invitó a interesados en la temática a participar de los programas y cursos de extensión de la Universidad Nacional de Córdoba, que buscan formar profesionales capaces de abordar el autismo con herramientas actualizadas y efectivas.








