A una década del crimen que estremeció al país, Fernando Farré habló desde prisión. Asegura que la pérdida de su trabajo lo empujó al brote que terminó con la vida de su esposa, y responsabilizó al exfuncionario Guillermo Moreno por ese derrumbe.

Desde el penal de Campana, el empresario Fernando Farré reapareció. En una entrevista con Infobae, el femicida culpó al exsecretario de Comercio Guillermo Moreno por su “caída en la locura”, alegando que el cierre de su empresa por restricciones a las importaciones fue el desencadenante del crimen. “Nos trataban como delincuentes por importar legalmente perfumes”, dijo.

Farré, que cumple prisión perpetua desde 2017, volvió a insistir en que no fue consciente de sus actos. Asegura que el deterioro emocional y el estrés lo empujaron al límite, aunque durante el juicio se descartó su inimputabilidad. En sus palabras mezcla pedido de perdón y victimismo: “Sueño con Claudia todas las noches. Quisiera llevarle una flor y pedirle perdón”, expresó.

Sin embargo, también apuntó contra su esposa, a quien acusó de haberlo “humillado” y de provocarle una “tormenta emocional” junto con el exceso de medicación. “Me sacaron todo, hasta la ropa interior. Eso y las pastillas me llevaron a la locura”, justificó. Su relato, lejos de limitarse al arrepentimiento, lo ubica como víctima de un contexto que, según él, lo superó.

Hoy, Farré sigue cumpliendo su condena en una cárcel bonaerense, entre intentos de justificar lo injustificable y un discurso que alterna el remordimiento con la negación. El femicidio de Claudia Schaefer continúa siendo uno de los casos más estremecedores de violencia de género en la historia reciente del país.

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