Aunque ambas provincias comparten Vaca Muerta, Río Negro recibe solo el 5% de las regalías debido a su menor superficie sobre la formación. Neuquén, con mayor extensión, concentra la producción y los beneficios.
La formación de Vaca Muerta se extiende por varias provincias del país, pero Neuquén es la que concentra la mayor parte de la actividad productiva. Gracias a su mayor superficie sobre esta rica reserva de hidrocarburos no convencionales, la provincia neuquina obtiene la porción más significativa de las regalías generadas por la explotación.
En contraste, Río Negro participa en menor medida de los beneficios económicos que produce Vaca Muerta. Aunque también posee territorio sobre la formación, su superficie abarcada es considerablemente menor, lo que se traduce en una participación reducida en la producción y, por ende, en las regalías.
Actualmente, Río Negro recibe apenas un 5% del total de las regalías, frente a la amplia ventaja que mantiene Neuquén. Esta diferencia ha generado debates sobre la equidad en el reparto de recursos y el desarrollo regional, especialmente en el contexto del crecimiento sostenido de la industria energética en la zona.








