Un incidente ocurrió en la estancia La Serrana, ubicada en Ricardo Rojas, Chubut, cuando un trabajador rural, Pedro Segundo Quilodrán, fue encontrado muerto. Inicialmente, se había sospechado de un paro cardiorrespiratorio, pero una confesión cambió el rumbo de la investigación.
Carlos Llaipén, un compañero de trabajo de Quilodrán, admitió haber disparado accidentalmente con una carabina calibre 22. Según Llaipén, el arma se disparó inesperadamente mientras la manipulaba, causando la muerte de Quilodrán de manera instantánea. El incidente ocurrió el día anterior, pero la falta de señal en la zona retrasó el reporte.
Tras la confesión, las autoridades locales informaron que se estaba investigando el hecho como un posible homicidio accidental. El Ministerio Público Fiscal ordenó la detención de Llaipén, quien está siendo investigado por el incidente.
El cuerpo de Quilodrán fue trasladado a la morgue para realizar la autopsia y confirmar la causa exacta de su muerte. La carabina involucrada en el disparo fue secuestrada como parte de las investigaciones en curso.








