El presidente Yamandú Orsi tiene la oportunidad de reformar el sistema de cuidados para garantizar una inclusión efectiva de las personas con discapacidad en Uruguay.

Desde la implementación de la política de cuidados en 2015, Uruguay ha avanzado en la atención a poblaciones vulnerables. Sin embargo, persisten deficiencias que excluyen a personas como Adriana Paciel, debido a restricciones de edad y criterios limitantes. El sistema actual, al enfocarse en la «dependencia», puede estigmatizar a quienes busca ayudar.

Investigaciones de Human Rights Watch resaltan la necesidad de rediseñar el sistema de cuidados, involucrando activamente a organizaciones de personas con discapacidad en su formulación e implementación. Se recomienda eliminar limitaciones basadas en la edad e ingresos, y diversificar los tipos de apoyo ofrecidos. Además, se sugiere explorar modelos exitosos en otros países, como los centros de vida independiente.

Con estas reformas, Uruguay podría consolidar su liderazgo regional en políticas de apoyo y cuidado, garantizando una inclusión más efectiva y respetuosa de los derechos de las personas con discapacidad. La participación activa de las comunidades afectadas es esencial para lograr un sistema más justo y equitativo.